Como cantaba Media Azahara, todo tiene su fin. Quedan tan sólo pocas horas para que Marcelo, Laura y Yago despidan Gran Hermano 12, convertidos en finalista, subcampeón y campeón de esta edición (no necesariamente por este orden). Los GH han pasado su última noche en el concurso viendo películas y preprarándose para la gala del jueves. Pero eso no ha sido todo, ¡también ha habido un ruidoso coito postreconciliación!
Las aguas han vuelto a su cauce entre los 'totitos'. Esta misma tarde les veíamos juntitos en la cama, acaramelados y diciéndose cosas bonitas. Laura se ha puesto melancólica y ha lloriqueado pensando en que no van a volver a dormir en un nicho. Marcelo le ha repetido una vez más a su chica que volverán a verse.
Después han hecho el amor en su lugar favorito, la ducha. Yago, que llevaba temiendo este momento desde que Marta se fue, se ha tapado con el edredón, pero el ruido de los cuerpos chocando y los gemidos de la de Parla se escuchaban desde la otra punta de la casa.
Atuendos de gala para la gran noche
A continuación, Laura y Yago se han probado las prendas que lucirán en la final. Parece que la parleña llevará un conjunto de corpiño ajustado y falda tul con vuelo de color rojo que, asegura, le ha costado "600 pavos". Marcelo, chisposo él, al verla con el vestido la ha comparado con Espinete, y Lady Di. El malaguita, por su parte, está empeñado en abandonar Guadalix con su camiseta del Málaga C.F. ; no así Yago, que estará muy elegante de smoking.
No hay mucho más que hacer en esta noche de paz, sin pruebas ni broncas. Para pasar el rato, la organización les ha puesto algunas películas, que los finalistas han visto acompañadas de palomitas.
Una 'bala' para Rubén
Después de la sesión de cine, los tres de Guadalix se metieron en la cama. Mientras el malaguita importunaba a su compañera de lecho con un recital de ventosidades, Yago se acordaba de varios ex compañeros. La cosa empezó de forma entrañable y divertida, pero degeneró en algo bastante inapropiado para una víspera de final.
Y es que Yago y Marcelo espezaron a cebarse en Chari y Rubén, al que tacharon de soso y cornudo. Yago recordó una vez más los famosos tonteos con 'el feroz' y Óscar, y apostilló: "Yo le llego a tirar un poco y se que habría reaccionado bien, porque yo lo notaba... yo sabía que ella me miraba y yo notaba cosas... Qué haría sola de fiesta. ¿Le daria el teléfono a algún futbolista de primera?". Pero lo más sorprendente probablemente no se sabrá hasta la gala del jueves: el zorro del desierto asegura que tiene "una bala" reservada, algo referente a la familia del gaditano, que podría perjudicarle seriamente si lo cuenta en un plató.
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