Entrando a regañadientes en el horreo en el que deberán vivir hasta nuevo aviso, Raquel, Liberto y Blanca han protestado porque consideran que los motivos a los que obedece la sanción no se ajustan a la realidad. Además, la colaboradora de Sálvame se ha tomado fatal la regañina del programa transmitida por el presentador Jorge Javier Vázquez.
"No soy ninguna 'bocachancla' como me han llamado", replicó en el confesionario Raquel Bollo, duramente reprendida, como sus otros dos compañeros, por infringir el sagrado precepto de no dar información del exterior. Aunque ella lo niega, en imágenes del reality se le ha visto hacer apreciaciones personales sobre qué concursantes eran mejor valorados por la audiencia. Entre lágrimas, la Bollo se quejaba de la mala imagen que considera estar dando con este suceso y amenazaba con dejar el concurso: " A mi no me merece la pena quedar con una imagen mala... La unica solición que me queda es, si lo veo injusto, irme y punto".
Mientras, Blanca y Liberto se echaban las culpas mutuamente por tener que dormir en tan incómodo almacén. Según el profesor de 'Las Joyas de la corona', la borbona ha tergiversado sus palabras (precisamente ella está castigada por difundirlas). Explica que si dijo que iban a entrar tres nuevos concursantes en la casona fue por mera "intuición" y no porque se lo hubiera contado su representante.
Indignadísimo, Liberto ha reclamado a la organización el vídeo que demuestre que ha dado a conocer información del exterior y piensa tomar medidas drásticas hasta que se haga justicia. " Solo me conformo con la verdad. Tengo miedo de que sin hablar me cuelguen culpas. Voy a hacer una huelga de hambre si esto no se dilucida", le confiaba a Escassi.
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