Tras años enfrentados, 'Sálvame Deluxe' ha conseguido que Jaime Peñafiel y Belén Esteban se sienten en un plató de televisión y protagonicen uno de los enfrentamientos más esperados. Cansada y muy dolida con los comentarios que durante mucho tiempo el periodista hizo de ella en 'Está Pasando", la princesa del pueblo arremetía duramente con él y aseguraba que no tenía narices a decirle todo lo que había estado diciendo de ella a la cara.
Ansiosa por sentarse frente a frente con uno de sus mayores enemigos televisivos, Belén Esteban acompañaba a Jorge al set de los cara a cara poniendo unas condiciones muy claras. "Yo no me pongo al lado de él, me pongo enfrente. Quiero que me explique lo que ha estado diciendo durante año y medio de mi en 'Está Pasando': que me quiten a mi hija, que soy agresiva, que soy una oportunista. Le voy a dar la oportunidad de expresarse y le voy a contestar. Sin mal rollos ni nada, con mucha educación", decía la recién renovada Belén Esteban.
La princesa de San Blas llegaba más guerrera que nunca y dispuesta a no hacer las paces con la persona que le ha hecho tanto daño, tal y como ha confesado en varios momentos de la entrevista. "Espero que no me pida por perdón porque estamos en Navidad. Yo la Navidad la paso con mi familia. Esta gente me da exactamente igual. Si lo hace me piro", aseguraba la co presentadora de 'Sálvame'.
A medida que pasaban los minutos y sin Jaime Peñafiel en plató, Belén se iba poniendo tensa. "Mala madre, ¿por qué?, ladrona ¿por qué?, maleducada ¿por qué? ¿No le da vergüenza defender a alguien que supuestamente roba? Y lo que más pena me da es que es una persona mayor y le tengo que tener respeto porque la educación a mi mis padres me la han dado en ser una persona como tiene que ser. No le voy a faltar al respeto en ningún momento", decía una Belén dispuesta a pedir todas las explicaciones necesarias a Peñafiel.
Minutos después y con Belén dispuesta a escuchar todo lo que el periodista tenía que decirle, Jaime Peñafiel hacía su entrada en el plató de 'Sálvame Deluxe' para enfrentarse a la princesa del pueblo.
La batalla se planteaba dura y Jaime hacía un intento por sentar las bases del enfrentamiento. "No quiero que dudara de nada de lo que voy a decir. Me gustaría que la cirugía fuera más profunda", decía el periodista.
No empezaba con buen pie y Belén montaba en cólera al escuchar la frase del periodista. "Empezamos mal. Si quiere pedimos que vuelvan a poner los vídeos a ver si se tranquiliza. ¿Sabe cuanto se ha cebado usted conmigo en 'Está pasando' acusándome de mala madre, agresiva...?", decía furiosa la Esteban, que durante largo tiempo se sintio apaleada por Peñafiel.
"Asumo lo que he dicho en cada momento", decía conciliador. "Me alegro de que esté cambiando pero yo me había acostumbrado a su rostro. Ha cambiado y me gustaría que cambiara más", decía el invitado para finalizar su intervención.
Con cada intervención sosegada del periodista, Belén iba poniendo los puntos sobre las íes al periodista. Obcecada al no recibir la respuesta que desaba, el tono de la Esteban iba in crecendo y arremetía duramente contra Peñafiel. "El que tiene que cambiar es usted que con toda su educación falta a gente como yo y yo nunca le he faltado a usted. Gente como usted tan preparada y educada. Yo no he visto a nadie tan educado que sólo sepa meterse con una persona como yo que se gana la vida y habla de su vida. Y usted no sabe nada de mi vida", decía furiosa.
La tensión aumenta en plató
"¿Usted por qué dice que soy mala madre y me tienen que quitar a mi hija?", preguntaba una Belén indignada ante el continuo ataque que había recibido por parte de su contrincante, que se defendía como podía. "Lo dijo el defensor del menor", respondía ante el asedio de Belén mientras reconocía que la co presentadora de 'Sálvame no había cambiado en nada tras su operación de cirugía estética.
El comentario de Jaime Peñafiel producía uno de los momentos más intensos del programa y ambos invitados se metían de lleno en una discusión en la que los improperios se convertían en una constante.
Belén Esteban (B): "Me han tocado la cara pero no el cerebro."
Jaime Peñafiel (J): "Debían haber tocado el cerebro también."
B: "El cerebro a usted, porque la educación que usted tiene me me la paso por la peineta. ¿Usted cree que yo le puedo tener algún respeto?. Le ha hecho a mi madre llorar en su casa sentada y a mi también porque me ha llamado hasta drogadicta. Lo ha dado a entender y ha dicho que mi hija se vaya con su padre... Usted un hombre que escribe libros sobre el rey..."
J: "Deje de señalar"
B: "Señalo porque gesticulo mucho. Soy una tía de ley no como usted que es más falso que judas."
Belén se crece
"Está acojonado en el sillón", decía Belén al comprobar que Jaime Peñafiel no contestaba a ninguna de sus preguntas y trataba únicamente de defenderse. "Me gustaría saber si ha estudiado", preguntaba Jaime que aseguraba que Belén poco había aprendido en sus años de estudio.
Arropada por su público, Belén daba respuesta a todas las insinuaciones del invitado con mucho desparpajo. "¿Y usted? ¿Dónde están sus diplomas? Yo he estudiado lo que esta gente quiere para que esté aquí sentada. Eso es lo que a usted le duele que una chica de barrio, sin estudios, esté trabajando en la televisión. Lo que quiero es que me explique lo que dice de mi. "Es un cobarde", decía una Belén que tenía que escuchar cómo Jaime la llamaba demagoga.
"Yo se lo digo a la cara. No llevo año y medio en televisión faltando el respeto y usted me lo ha faltado a mi, a mi familia y a mi hija", respondía Belén a un Jaime que la acusaba de utilizar a su hija Andrea.
"¿Le digo yo cosas de su hija? No porque tengo más respeto. La diferencia es que yo quiero a mi hija no se si usted la querrá?", respondía Belén a un Jaime que arremetía contra la forma de ser y explicarse de la co presentadora. "Usted necesita una cirugía estética total y profunda. Es bastante grosera."
"Es usted un cobarde"
A medida que transcurría la entrevista, Belén arremetía más duramente contra un invitado que evitaba responder a sus preguntas y no le aclaraba los motivos que le habían llevado a arremeter contra ella desde otro programa. Sin pelos en la lengua, Belén tildaba a Peñafiel de cobarde. "No tiene narices a decirme lo que ha dicho ahí. Sólo sabe hablar del abuelo de Leticia y de Belén Esteban".
"Lo que ha dicho lo mantengo y lo incremento. Usted es una persona que no tiene arreglo", respondía Jaime Peñafiel ante las envestidas de una dolida Belén Esteban que no dudaba en arremeter más duramente contra su enemigo.
"¿Y usted tiene? Pienso que el papel que tuvo que correr le salió tan mal que está reprimido y cree que a todos nos va a pasar lo que a usted. Yo no quiero sacar temas que le pueden doler, como usted ha hecho durante año y medio. Se ha reído de mi padre. Usted no le ha conocido, ni a mi madre, ni a mi hija... y ha defendido a la Campanario, una supuesta ladrona para tirarme a mi por tierra. Cobarde", respondía la recién renovada rubia.
Belén seguía su argumentación contra un Peñafiel incapaz de responder a cada uno de los frentes que le abría la princesa de San Blas. "Usted ha hecho muchos comentarios. Si no hablaba de mi o el abuelo taxista de Doña Letizia no le contrataban y ahora está sentado frente a mi no dice nada. Donde las dan las toman. Ha llegado el momento en el que todo lo que le tengo que decir se lo digo a la cara", respondía exultante.
Arrollado por la energía de Belén, Jaime volvía a poner de manifiesto que Belén sigue siendo la misma. "Falta hacía que le hubieran tocado el cerebro", decía mientras Belén aseguraba que tenía unos principios que el periodista no tenía. "Más quisiera usted tener unos principios de la vida que me han dado mi padre Paco y mi madre Carmen cosa que usted no lo ha conocido. Miserable y cobarde... Ahora que me tiene cara a cara tenga narices. No tiene vergüenza ni cojones. Soy de barrio y a mucha honra"
Sobre Andreíta
Muy enfadada tras ver un vídeo en el que la acusaba de utilizar a su hija, Belén se defendía. "¿En qué exclusiva la ha visto?. Soy la madre que la parió y por mi hija mato. A lo mejor está frustrado como padre y quiere jorobar a los demás padres y yo no estoy frustrada. Yo sí que por mi hija mato y estoy donde tengo que estar", dice Belén duramente.
El invitado trataba de defenderse. "Lo que he criticado es que es que ha utilizado a su hija porque es de lo único que podía hablar aquí", pero Belén respondía resueltamente. "Porque la he parido. Si usted no habla de su hija es porque no tendrá la conciencia tranquila de buen padre pero yo la tengo perfecta."
Dolido con el comentario, Jaime Peñafiel pedía a Belén que no le obligara a decir lo que pensaba de ella pero la princesa del pueblo quería oirlo. "Dígalo. No es un hombre ni nada. Es una persona que se alimenta de personajes como yo. Durante año y medio he estado aguantando sus tonterías y ahora va a venir aquí a decirme maleducada y ha dicho que soy mala madre... Ahora tengo la satisfacción de que le tengo aquí enfrente y cuando me levante me voy a ir bien ancha y usted se va a ir con la cabeza gacha", aseguraba Belén a un Peñafiel que afirmaba que había tenido la dignidad de acudir al programa.
La colaboradora insistía en el dolor que Peñafiel había causado a su familia durante largo tiempo. "Usted me ha mandado muchas veces a casa de mi madre y mi padre que estaban llorando. Año y medio. Todos los días. No me callo, ¿Que coño me voy a callar si a usted le llaman Peñainfiel?".
"¿Hemos acabado? Por que me he quedado muy a gusto diciendo todo lo que tenía que decir, no como usted que no ha tenido cojones", intentaba terminar la Esteban que comprobaba que a Jaime Peñafiel aún le quedaban fuerzas para responder una vez más. "A usted le falta un mínimo de educación", le decía.
Decidida a decir la última palabra, Belén respondía con energía. "Usted no tiene amor propio. Usted sólo habla a la cámara. Explíqueme todo lo que ha dicho", pedía por última vez la Esteban que escuchaba atónita la disculpa de Jaime. "Mantengo todo lo que he dicho y si la he herido lo siento pero usted se está volcando en mi todo lo que han dicho de usted", le decía.
Las insinuaciones de Jaime Peñafiel
Cuando parecía que todo estaba a punto de terminar, Belén ha recordado un episodio que la hizo pasar un mal trago. Según la copresentadora, Jaime comentó en alguna ocasión que la princesa de San Blas se había dejado una aguja en un coche. "Lo que quiero decir lo digo. Usted tuvo un día la falta de delicadeza de dejar una aguja de insulina que usted se había inyectado", aseguraba Jaime.
"Eso no es verdad", decía muy ofendida Belén." Aquí hay un compañero que también es diabético. Y una aguja de insulina no es una papelina. Todos leimos ese artículo...", aseguraba mientras decía que Jaime no podía entrar en Palacio porque les daba vergüenza y afirmaba que el periodista hablaba de unos Reyes a los que conoció en los años 70 pero que no volvió a ver.
Ante la verborrea y locuacidad de Belén, Jaime Peñafiel intentaba dar por terminado el enfrentamiento. "Está usted loca. Es una demagoga. Venía dispuesto a hablar con usted pero sigue siendo igual de chula".
Sin embargo, Belén no estaba dispuesta a conceder a Jaime Peñafiel el privilegio de cerrar la entrevista. "No soy igual de cobarde que usted. Sangre y figura hasta la sepultura."
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