Aída Nízar tiene una nueva oportunidad en 'Supervivientes'. Tras ser expulsada con el 87 por ciento de los votos, la concursante, por decisión del programa, ha pasado a vivir con los 6 concursantes anónimos que viven en un barco perdido entre las islas.
Aída no era muy querida entre sus compañeros y parece que la audiencia tampoco la quiere. Se enfrentaba a Reyes Estévez en lo que era la primera expulsión del programa y Jorge Javier anunciaba su nombre. Además el presentador daba un dato: Había sido expulsada con el 87% de los votos.
Aída abandonaba la Palapa desolada sin que sus compañeros la hicieran mucho caso, estaba claro que su paso por el programa no había sido muy halagüeño. Pero lo que la concursante no sabía era que el concurso no acababa para ella. La organización había decidido que Aída pasaba a formar parte del grupo de los anónimos.
En el barco perdido entre las islas hondureñas esperaban los 6 concursantes anónimos que ya intuían algo de lo que iba a pasar. Cuando se acerco la barca que trasladaba a Aída Nízar, los concursantes la recibieron entre aplausos, nada que ver con sus anteriores compañeros. Una vez arriba era abrazada por todos que se mostraron muy felices con la llegada de la colaboradora. Aturdida, Aída preguntaba una y otra vez: "¿Pero esto continúa?". El presentador resolvió sus dudas asegurando que su aventura no había terminado y que seguiría allí.
Aída mostró mucha complicidad con uno de los anónimos, Diego Durán . Según informó Marta en el programa de Ana Rosa los dos eran "muy amigos". Parece que Aída ha encajado mejor en este grupo, pero sólo el tiempo decidirá el destino de la concursante más polémica de 'Supervivientes'.
Aída no era muy querida entre sus compañeros y parece que la audiencia tampoco la quiere. Se enfrentaba a Reyes Estévez en lo que era la primera expulsión del programa y Jorge Javier anunciaba su nombre. Además el presentador daba un dato: Había sido expulsada con el 87% de los votos.
Aída abandonaba la Palapa desolada sin que sus compañeros la hicieran mucho caso, estaba claro que su paso por el programa no había sido muy halagüeño. Pero lo que la concursante no sabía era que el concurso no acababa para ella. La organización había decidido que Aída pasaba a formar parte del grupo de los anónimos.
En el barco perdido entre las islas hondureñas esperaban los 6 concursantes anónimos que ya intuían algo de lo que iba a pasar. Cuando se acerco la barca que trasladaba a Aída Nízar, los concursantes la recibieron entre aplausos, nada que ver con sus anteriores compañeros. Una vez arriba era abrazada por todos que se mostraron muy felices con la llegada de la colaboradora. Aturdida, Aída preguntaba una y otra vez: "¿Pero esto continúa?". El presentador resolvió sus dudas asegurando que su aventura no había terminado y que seguiría allí.
Aída mostró mucha complicidad con uno de los anónimos, Diego Durán . Según informó Marta en el programa de Ana Rosa los dos eran "muy amigos". Parece que Aída ha encajado mejor en este grupo, pero sólo el tiempo decidirá el destino de la concursante más polémica de 'Supervivientes'.
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