Chari está muy preocupada por lo que pueda estar haciendo Rubén fuera de la casa de Guadalix de la Sierra. La explosiva rubia se arrepiente de no haberle mandado a su madre la misión de vigilarle, y es que no se fía de que pueda estar tonteando con otra.
Cree el ladrón que todos son de su condición, y eso es lo que le está sucediendo a Chari tras la expulsión de su chico, Rubén. La concursante, que mantuvo un comportamiento demasiado cercano con algunos de sus compañeros de concurso mientras que su novio no paraba de hablar de ella en la casa de al lado, está muy preocupada por lo que este pueda estar haciendo fuera de 'Gran Hermano 12'.
Chari, que recibió el pasado jueves la visita de su madre, no se dió cuenta de encomendarle una misión muy especial: cuidar de Rubén. "Se me olvidó decirle a mi madre que me cuidasen a Rubén y que este ojo lo ve todo", le comentaba la rubia explosiva a gran amiga dentro de la casa, Laura.
Chari ve normal esta preocupación, ya que ella está encerrada y él es libre para hacer lo que quiera sin tener que pensar en lo que puede estar haciendo ella dentro de la casa. "Rubén no tiene que preocuparse porque yo estoy aquí dentro y sabe que aquí no hay muchos hombres. Además, los que hay no están disponibles", aseguraba la concursante haciendo un rápido repaso por los chicos.
Pero Marta, que no ve ningún peligro en lo que pueda estar haciendo Rubén, intenta tranquilizar a su amiga del alma: "que bien te va a venir esto de estar aquí y Rubén fuera. Así aprendes que puedes estar sin él, que puedes confiar en él y que no hay mujer en el mundo que se iguale a ti". Lo que no sabemos es si el chico está de acuerdo con las opiones vertidas por las dos amigas.
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