21/11/10 |

Chari a Rubén: "Te veo tontear con Marta y no me gusta"

El esperado reencuentro entre Chari y Rubén no está yendo tan bien como la pareja preveía. La tristeza se apoderó de él y los celos de ella. Una larga conversación con la noche de testigo destapó que, mientras que la preocupación de Rubén es que no se encuentra cómodo con su nuevo grupo, no sabe dónde ubicarse y no le gusta que cada uno vaya a su bola, Chari se retuerce de celos por el buen rollo de su chico y Marta, a quien culpa de estar siempre "encima" de él y de buscarlo siempre que ella se da la vuelta. Ingredientes suficientes para que la pareja tuviera su primera bronca…


La soledad de la noche fue testigo de la conversación más íntima  de Chari y Rubén. La pareja tuvo un arranque sinceridad mientras sus compañeros dormían y terminaron diciéndose unas cuantas verdades a la cara. Todo surgió porque Chari notó que su chico tenía una actitud rara. Él le comentó que se sentía "muy raro" en la casa y que el cambio de compañeros lo había sumido en la tristeza. "En el otro lado todos nos metíamos al jacuzzi con nuestro cubatita, todos, no faltaba ni uno y aquí… Tres por aquí, dos por allí… No sé, no me gusta", confesó Rubén.

El concursante continuó contándole a su novia que no sabía dónde ni con quién ubicarse en la casa, que con algunos compañeros como Terry o Patri no tiene afinidad, "no pego", y que Yago y Marta, con quien realmente le gustaría estar, van a su bola. Rubén también dijo que se sentía "mal e incómodo" y que no veía normal que Arturo, nada más entrar en el concurso se pegara como una lapa a los gallegos. Chari se lo explicó: "Yo creo que la gente le chupa un poco el culo a Yago porque como ven que gusta fuera, eso a la gente le influencia". Aunque le aconsejó, que para que no se sintiera tan solo, debía acercarse más al gallego y a Arturo.

Chari aprovechó entonces el bajón Rubén y sacó toda su artillería pesada. "¿Tú preferirías que no estuviera yo aquí?", le preguntó de pronto. Él le contestó con un rotundo "no", aunque la respuesta no sirvió a su chica. Chari aprovechó la ocasión para echar en cara a su novio que en un momento determinado hubiera dicho que estar con ella "podía perjudicarte de cara a los compañeros". El concursante le explicó que jamás dijo eso y que se refirió a que jamás dejaría que eso sucediera.

Ninguna de las palabras de Rubén lograban convencer a Chari, que en realidad no era eso lo que le preocupaba, lo que verdaderamente la estaba matando eran los celos que sentía por el buen rollo que Rubén tenía con Marta: "Te veo tontear con Marta y no me gusta. Es la actitud tuya, veo demasiado tonteo, la tratas demasiado bien". El chico, viendo lo que se le venía encima, la cortó rápidamente para darle la explicación pertinente: "Yo dije en el confesionario que a mí Marta no me gusta, nunca me ha gustado, lo que pasa es que me llevo muy bien con ella".

La rubia no pensaba igual, para ella el hecho de que su chico y la gallega se lleven tan bien desde el principio del concurso no es plato de buen gusto. Chari se sinceró totalmente y le confesó a su chico que lo que más le había molestado de todo fue que cuando se reencontraron tras el cambio de casas él abrazara a Marta antes que a ella: "Me sentí muy mal". Rubén le explicó que para él, la gallega es sólo una amiga, que fue un gran apoyo cuando entró en el concurso y que gasta bromas con ella como con cualquier otro compañero.

Chari dio un giro a la conversación y apuntó a Marta como la culpable de todo: "Esas relaciones no las veo muy normales. Es una falta de respeto hacia mí y no me imaginaba que ella iba a reaccionar así contigo estando yo aquí". Según la rubia, Marta está constantemente detrás de su novio y, aunque la mayoría de las veces se corta cuando ella está presente, "se le echa encima" en cuanto se da la vuelta. Además, sentenció muy segura de sus palabras que esa actitud iba a perjudicar mucho a la gallega: "Si tú te sientes cómodo así, vale, pero esto le va a perjudicar a ella".


Rubén tomo la palabra para intentar hacer entrar en razón a Chari. Le declaró de nuevo su amor, le dijo que "aquí me he dado cuenta de muchas cosas" y tras su reencuentro fue al confesionario para decir que "teniendo a mi novia aquí conmigo es cuando realmente estoy empezando a disfrutar de 'Gran Hermano'". La respuesta de Chari lo dejó helado: "Yo no lo siento así, te veo muy raro y creo que preferirías que yo no estuviera aquí".

La rubia echó la vista atrás y, sorprendentemente recriminó a su chico algo que no tenía mucho sentido (sobre todo recordando los peligrosos juegos que ella tuvo con Julio 'El Feroz' la primera semana de concurso): "Para mí lo más importante son los cuatro primeros días, yo lo pasé muy mal pero tú estabas disfrutando con Marta y con Mireia, por eso lo pasaste mal después, porque te quitaron a tus amigas". Rubén, un poco harto de la conversación y de que Chari, no entrara en razón de ninguna forma, le contestó que lo que debe hacer es "olvidar los cuatro primeros días. Quédate con todo lo que te he demostrado. Nunca estás contenta con nada y no aprecias lo que tienes. A mí me gustaría que la gente flipe de la pedazo de pareja que somos y no con las pamplinas estas".

Sin estar muy convencida, Chari empezó a recular: "No quiero que te amargues la existencia aquí, quiero que disfrutemos". Y tras pedirle algo parecido a unas disculpas por su paranoia y explicarle que si le había dicho todo esto era porque "tenemos que contarnos todo lo que sentimos y todo lo que nos pasa", concluyó pasando del resentimiento al romanticismo en tres milésimas de segundo: "Como tú hombres no quedan, encontrar un novio con tus sentimientos es muy difícil, yo me siento afortunada. Sólo que a veces hay actitudes que me chocan".

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