Flor y 'el Feroz' podrían ser expulsados de Gran Hermano

Que los concursantes actúen de una manera determinada para ganarse el favor de la audiencia no es nada nuevo, pero Flor y 'El Feroz' podrían haber dado un paso más allá. Así lo entiende la organización de 'Gran Hermano', que podría estar a punto de sancionar a la pareja por intentar convencer a la audiencia de algo que no es. Aquí te ofrecemos algunas de las imágenes que podrían demostrar que su amor no es verdadero.

"Depende de lo que hagas aquí va a depender lo que tengas fuera al salir. No hay más, es matemético. Tú estás cobrando en todas las discotecas y en todos los platós de televisión y que la gente te diga misa pero tú estás con la mano abierta y te ganas 100.000 o 200.000 euros en un año, algo que con 26 años no se lo gana nadie", estás son las decláraciones inéditas de 'El Feroz' y Flor por las que la organización de 'Gran Hermano' podría tomar medidas inéditas en la historia del reality con los dos concursantes.

Los nuevos amantes de Guadalix no le quitan ojo a la cámara mientras se besuquan en el jacuzzi, discuten qué escenas podrían tener más tirón en 'La Noria' o en 'El Debate' y le dedican un morboso magreo en la ducha a Mercedes Milá. ¿Es la relación de Julio y Flor un montaje? La organización del reality podría sancionarles este mismo jueves, basándose en que "han hablado abiertamente" en la casa de su estrategia para que, una vez fuera, consigan que les inviten a la mayor cantidad posible de programas de televisión, lo que en el mundillo se conoce comunmente como "hacer platós".

El edredoning más rápido de la historia
La polémica está servida tan sólo cuatro días después de que Flor y Julio se concocieran tras la gala de expulsiones. Esa misma noche comenzaron una apasionada relación que les ha convertido de la noche a la mañana en protagonistas indiscutibles de la actualidad del concurso.

Conscientes en todo momento de que las cámaras vigilan tanto sus encuentros sexuales como sus posibles broncas o reconciliaciones y dirigiéndose directamente a ellas, Julio y Flor podrían haber encontrado la manera de canalizar su romance de la manera más rentable. Si esta actitud es sancionable o no, corresponde ahora al Gran Hermano decidirlo. De cualquier forma, sería esta la primera vez que la organización toma cartas en un asunto de esta naturaleza, ya que nunca antes se había preocupado de los posibles montajes orquestados por los concursantes.