Apesadumbrado, nervioso y entre sudores, Fran Álvarez ha pedido perdón a Belén Esteban por haber tenido una amante, Arantxa Contreras, durante su trámite de divorcio. Sin embargo, mientras tanto, otro programa de televisión sacaba a la luz el testimonio de otra chica con la que también habría tenido encuentros íntimos.
Lo que más le gustaba es que tenía la piel blanca y una actitud como "de quinqui". Éstas han sido las primeras palabras de una chica que, sin dar la cara en la grabación, ha reconocido ante las cámaras que ha mantenido al menos un encuentro íntimo con Fran.
Según ha comentado la que ha sido denominada por ahora como "la otra", estando "de fiesta" hubo un cortejo de "muchas miradas" con Fran que rápidamente se convirtieron en "tocamientos".
Por lo visto, según el testimonio, Fran fue al grano y directamente la llamó "morenaza", para a continuación invitarla a esconderse con él: "Me dijo que nos fuéramos al aseo... para sentirnos más cómodos".
Las fiestas de Fran
Más adelante, esta chica ha descrito las fiestas que organiza el marido de Belén Esteban como auténticas "locuras infantiles". Unas francachelas impropias de un adulto: "para la edad que tiene es plan de niñato, de hacerse sus birras y ji-ja-jo, vamos a jugar un futbolín".
Lo cierto es que tras estas juergas puede que Fran tratase de compensar una realidad mucho menos divertida: los problemas con su mujer. Según le reveló un amigo de Fran a esta chica: "No sabía si quería a Belén". Una mujer a la que "no la aguantaba nadie".
Para ella, Fran "daba la sensación de que estaba muy triste y en esa época que estaba mal, que se iba a separar iba de fiesta". Divirtiéndose, como todos los que salen a menudo, concluía el testimonio, Fran "bebe como la mayoría de la gente, cuando sale de fiesta una detrás de otra y todo lo que lleva la noche. En la fiesta hay de todo".
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