Cuando parecía que las aguas entre Kiko y Chayo Mohedano estaban calmadas, un nuevo frente se ha vuelto a abrir entre ellos. Una grabación en la que la cantante hablaba mal sobre el colaborador y el cuestionamiento de Kiko sobre la carrera discográfica de Chayo han sido los detonantes. La discusión ha llegado hasta tal punto que Chayo ha terminado por romper con el dúo musical que iban a formar en el festival de Eurovisión.
Aunque parecía que la guerra entre Kiko y Chayo ya había terminado, el colaborador y su madre, Rosa Benito, han vuelto a enfrentarse en plató debido a la cantante. Kiko no podía olvidar una grabación que escuchó y en la que Chayo le ponía verde. Sin embargo, Rosa defendía a su hija asegurando que todo lo que pensaba sobre él se lo decía a la cara y creía que no debía sorprenderle esta grabación cuando no paraban de discutir y de lanzarse malas palabras públicamente. Además, le reprochaba ser un falso ya que fuera de cámaras tenía un buen trato con su hija, incluso la besaba, y dentro de plató no paraba de atacarla. Pero la situación se ha complicado aun más cuando Kiko ha puesto en duda el nivel artístico de Chayo y ha dicho que sólo es conocida por ser sobrina de Rocío Jurado.
Llegados a este punto, Chayo Mohedano ha llamado muy enfadada al programa para defender su carrera discográfica e instarle a que finalizara con esta guerra. Pero Kiko no estaba dispuesto a zanjar el tema y ha seguido metiendo cizaña diciendo que sus discos no los comparaba nadie. "Agradezco no ser amiga tuya, agradezco llevarme mal", le ha dicho Chayo muy tajantemente. Y además ha seguido recriminándole diciendo que todo el mundo le odia: "Hasta la gran profesional Mercedes Milá te ha dicho en la cara que eres mala gente", soltaba la colaboradora como colofón final.
Jorge Javier ha intervenido para intentar apaciguar los ánimos, y les ha solicitado que dejaran de lado las malas formas ya que ambos iban a tener que llevarse bien durante su candidatura a Eurovisión. Entonces ha sido cuando Chayo ha soltado el bombazo: "Yo no voy a ir a Eurovisión con él". Y Kiko, muy orgulloso, contestaba: "Por supuesto, ni yo tampoco". La cantante seguía metiéndose con él y aseguraba que no lo hacía porque no estaba dispuesta a tener que enseñarle y Kiko bromeaba con que él le tendría que pegar el micrófono a la mano para que no se le cayera.
Ajena a todo esto, Rosa Benito, que reconocía estar pasando un mal rato debido a toda esta discusión, recibía la llamada de un músico de Rocío Jurado que le contaba que Kiko se había puesto en contacto con él para pedirle que fuera hablando mal de ella y de su hija. Este flautista, que responde al nombre de Pepín Oliver, se ha puesto al teléfono con Jorge Javier para asegurarle que esta información era verdadera y que incluso tenía testigos. Por su parte, Kiko desmentía que esto fuera cierto y se ha puesto a gritarle por el móvil que era un "embustero, un chorizo y un mangante".
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