Los días en la isla se hacen cada vez más largos, lo que da para que los supervivientes piensen mucho más en lo que pasa fuera. Esto es lo que le ha sucedido a Beatriz Trapote. La palabra infidelidad le ha venido a la cabeza e incluso ha afirmado que cuando vuelva a la civilización le va a decir "dos cositas" a su chico. Este estrés se ha visto reflejado en la relación de la reportera con Marijo, a quien no quiere dejarle más bikinis porque "no es higiénico depende de a qué personas se lo dejes".
La añoranza de la civilización está cada vez más patente en 'Supervivientes: Perdidos en Nicaragua'. Beatriz Trapote se ha puesto melancólica y ha contado a sus compañeros cómo surgió el amor entre ella y Víctor Janeiro. "Fue un amor a primera vista", aseguró la reportera. La carta y las fotos que su chico le envió le han dado mucha fuerza pero no han sido suficientes para que sus pensamientos no se dispararan.
En una conversación sobre el amor y sus parejas, Trapote se preguntó qué estaría haciendo Víctor Janeiro en "la civilización". La periodista comentó que en cuanto regresara a España lo primero que le iba a decir a su chico sería "Ay Victítor, ¿qué ha hecho en mi ausencia?" y continuó diciendo: "No sé por qué, pero de las infidelidades siempre se acaba enterando uno". Trapote les comentó a sus compañeros que necesita que Víctor le cuente "varias cosas" y añadió: "Le voy coger por banda y le voy a tirar de las orejas".
En España han sido muchos los rumores sobre las supuestas infidelidades de Víctor Janeiro a Beatriz, comentarios de los que Trapote no ha podido enterarse desde la isla pero que por lo que parece, la superviviente está empezando a intuir. Los nervios por lo que pueda estar haciendo su chico en su ausencia puede que hayan afectado a la superviviente en su forma de ser hacia los demás, concretamente hacia Mariajo.
La amistad entre ambas ha pasado a mejor vida y la reportera ya no soporta nada de lo que hace o dice la tasadora de joyas. La última polémica ha surgido a causa de la ropa, todas las concursantes se han quejado de que Marijo siempre se queda con la ropa de los expulsados y además continuamente pide a sus compañeras que le dejen sus pertenencias.
La vasca se acercó a Trapote para pedirle un bikini y, después de dejárselo, se acercó al resto de compañeras para contarles lo sucedido. La reportera se quejó de que compartir la braguita del bikini "no es higiénico", pero unos segundos después matizó con el resto de chicas: "No es higiénico con depende de que personas". Es decir, según la reportera, no existe ningún riesgo si comparte su bikini con las chicas jóvenes pero si lo puede haber si se lo deja a Marijo.
Este conflicto no ha sido el único entre Trapote y María José. La periodista ha desarrollado de nuevo su doble cara, del mismo modo que lo hizó en su día con Bea 'La Legionaria', y tras una tranquila y amigable conversación con la tasadora de joyas, en la que la Marijo le contaba que "si con el trabajo no se gana voy a ver si gano tocándome la pochocha todo el día".
Beatriz no debió entender bien las palabras de su compañera, ya que poco después se dirigió al resto del grupo para comunicarles que María José le había dicho que no iba a cocinar más porque lo que iba a suceder era que "a partir de ahora, vosotros me vais a dar de comer a mí". ¿Estarán estos sucesos causados por el nerviosismo que siente por lo que pueda estar haciendo su novio, Víctor Janeiro, en la civilización?
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