Este jueves María José tiene más probabilidades que nunca de salir expulsada. Quizás por ello, para ganar puntos frente a la audiencia, la anónima ha sacado fuerzas de flaqueza y se ha puesto a trabajar con renovado ímpetu. Lo chocante es que su contricante, Beatriz Trapote, haga campaña a favor de la vasca situándola como ganadora del concurso.
Un terremoto sacude Buttonwood Cay. Se trata de María José, que desde el fin de semana está que no para, poniendo especial ahínco en la recolección de leña y marisco (un cangrejo casi se queda con su dedo, dicho sea de paso). Sus compañeros, bastante más relajados, contemplan asombrados el ajetreo de su compañera. Algunos, como Beatriz Trapote, están convecidos de que lo hace de cara a la galería: "Ya está, ella va a ganar el concurso. Está haciendo su papel. Cada día sabe mejor cómo actuar".
Estrategias al margen, lo más sorprendente de todo es que Trapote no sólo postula que María José ganará el concurso, sino que además se muestra feliz por ello: "Me alegraría que fuera la ganadora de esta edición porque es una gran superviviente". Y por si esto fuera poco, la famosilla nominada da a enteder que su rival ha sido y es la protagonista absoluta del concurso y que, como tal, se merece su propio 'spin off', como en las series de TV, sin comparsas: "Se merece una edición para ella, a solas, y que deje actuar a los demás porque Parri es como el bufón, el perrito que va al lado de Mariajo".
María José ya vive, de hecho, su propia edición de Supervivientes. Alejada del resto de chicas en las que ya no confía, con el único apoyo de Parri, la tasadora afronta esta última semana como una auténtica 'Robinsona'.
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