Se acerca la final y, tras una temporada en la que todos parecían querer irse, los concursantes empiezan a mirar el premio con ojos golosos y al de al lado como un rival. Llegó la hora de concursar. María José ahora podría revelarse como la nueva reina de la estrategia. Perdi y Deborah sienten que han sido manipulados por ella desde el principio.
Miguel Ángel Perdiguero piensa que Maria José no está jugando limpio. Considera que la mami del grupo no ha ido con la verdad por delante, y que se ha valido de mentiras para no ser nominada: "Nos ha engañado a todos", comenta.
Más sorprendente es el testimonio de Déborah. La muchacha explica que ha ido "atando cabos" y ahora se siente utilizada por su compañera en el bando de los 'anónimos': "a ella le benficia porque sabe que mi voto no lo va a tener nunca".
El arroz convertido en salmuera
María José, que duda cabe, es una mujer de carácter, que saca su verdadero rostro a la hora de mandar. La tasadora de joyas arremetió contra sus 'pinches de cocina', Malena y Sonia, cuando, al probar el arroz , comprobó que había sido cocinado únicamente con agua de mar. No es cosa de chiste: aunque algunos intentaron comer algo haciendo de tripas corazón, una olla entera de arroz fue directa a la basura.
Los compañeros perdonan la pifia de las chicas, aceptándolo como un error humano. Sin embargo, Malena afirma que habría sido la propia Mariajo la que las mandó llenar el cazo con agua de mar, teoría a la que se aferra el cada vez más nutrido grupo de detractores de la bilbaína: "Nos ha querido engañar... les manda una cosa, se lo manda confundido, para demostrar que ella lo hace bien y las otras mal", entiende Perdi.
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